El 3×2 del cine venezolano: las 6 mejores películas de los últimos dos años
No es secreto para nadie que el cine venezolano, sin duda, ha tenido un importante repunte en los últimos años, especialmente con cintas que prácticamente le han dado la vuelta al mundo y han traído a casa importantes galardones y críticas. Expansión sería una buena palabra para calificar las múltiples historias que nos topamos en la pantalla grande «Made in Venezuela».
1. La casa del fin de los tiempos (2013)
En 2013 Alejandro Hidalgo nos trajo lo que no sólo fue su ópera prima, sino básicamente la primera película venezolana de suspenso y ¿por qué no? de terror, convirtiéndose en un fenómeno taquillero que atrajo masas a las butacas, excelentes comentarios entre el público. Cabe acotar que el estreno en Colombia fue todo un éxito y le dio continuidad al film. Cine Jardín no titubeó del miedo y prepara una proyección (a la que estás invitado) para el próximo 31 de octubre… sí, lo hicimos a propósito.
En este largometraje Ruddy Rodríguez (Dulce) enfrentó el reto de lucir y actuar mucho mayor de lo que realmente es, apoyada en el maquillista Alex Mathews (quien trabajó en “El secreto de sus ojos” ganadora de un Óscar para Argentina en 2010).
Gonzalo Cubero (Juan José) aportó un aura apropiada y tenebrosa no sólo a la casa en sí misma, sino a la dinámica “familiar”. Aunque hay que destacar la valiosa actuación del joven Rosmel Bustamante (Leopoldo), quien apeló a una interpretación natural y fluida, por lo que sedujo a la audiencia a seguirlo a través de su recorrido interior y exterior junto al aún más chico y vivaz actor Héctor Mercado (Rodrigo).
La participación de Guillermo García (cura) le da al film un plus, ampliando el abanico actoral que hacen vida en y alrededor de esta singular vivienda, su tocayo Guillermo Londoño (policía) aporta una pizca de jocosidad desde la reja donde cuida de la condenada Dulce.
2. Papita, Maní, Tostón (2013)
Hacer mención a este largometraje estrenado en 2013 trae consigo la obligatoriedad de recordar que se convirtió en la película más taquillera en la historia del cine venezolano, cuando alcanzó una impresionante suma de más de 1 millón 300 mil espectadores; Y ¿quién dirigió este blockbuster hecho en casa? Luis Carlos Hueck.
Esta comedia romántica encuentra a Andrés (Jean Pierre Agostini), un fanático extremista del equipo de béisbol los Leones del Caracas, con Julissa (Juliette Pardau): una fiel seguidora del Magallanes… no pudo entonces haber mayor ironía que el nacimiento de este flechazo entre rivales.
Aunque este film tiene con plena intención un sabor a fórmula exacta en su escritura, resulta fresco, dinámico y con dosis precisas de comedia, ni más ni menos, lo que enganchó desde su primera semana en cartelera a miles de espectadores que hacían colas y comentaban entre sí “dicen que es buenísima”, agotando funciones entre una ciudad y otra.
3. Azul y no tan rosa (2012)
En noviembre de 2012 el actor Miguel Ferrari se mudó de delante hacia el detrás de la cámara y se convirtió en el autor y director de la película que le regaló a Venezuela el primer premio Goya en España (2014). “Azul y no tan rosa” expone esta lucha de distintos niveles que enfrentan quienes hacen vida desde la diversidad sexual, por lo que su sola existencia se agradece a profundidad.
Diego (Guillermo García) y Fabrizio (Sócrates Serrano) solidifican el tan defendido mensaje de que el amor surge sin distingo ni limitaciones, al mostrarse como una pareja plenamente enamorada, quienes además enfrentan las discriminaciones propias de asumir tal relación.
Esta película es aleccionadora y expone una verdad que se hará inquebrantable con el pasar de los años, esa verdad irrenunciable de que somos quienes somos por igual sin distingo entre sexualidad, religión o color de piel.
4. Libertador (2014)
Superproducción, ese sería el adjetivo calificativo más exacto en torno al Libertador. De entrada un rostro ya internacionalmente conocido: Édgar Ramírez encarnando al ilustre Simón Bolívar y Gustavo Dudamel alzando su batuta en la banda sonora. Este trío venezolanísimo es completado por quien dirigió: Alberto Arvelo.
Sets impresionantes tanto de Venezuela como de España, cientos de extras, vestuarios ideados a medida y detalle, actuaciones de reconocidos actores internacionales, directores de departamentos oscarizados, animales, escenarios, planos, todo cuanto aparece ante el lente resulta breath taking: deja a cualquiera boquiabierto.
Ahondar en esta película sería cruel para quien no la ha visto e injusto por la amplitud abordada, con pros y contras pero, sin duda, con la visión de Arvelo por delante. Es la postulación por Venezuela para el renglón Mejor Película Extranjera en los premios de la Academia 2015 y aún puedes disfrutarla en algunas salas de cine a lo largo del país.
¿Lo más curioso y aplaudible? Que sirvió de escenario para la creación de la Película Escuela Simón Bolívar que congregó a estudiantes del área audiovisual de varios estados del país para experimentar lo que implica rodar una película de alta manufactura, una especie de pasantías.
5. Pelo Malo (2014)
Vaya un suspiro por delante cuando se menciona este film dirigido por Mariana Rondón y producido por su partner in crime Marité Ugás. En 2013 trajo a casa el premio más importante en el Festival Clase A de San Sebastián: la aclamada Concha de Oro.
Cine independiente en su más pura potencia, por la intimidad que subyace en su historia, tan dolorosa como cotidiana. Mariana logra a través de Junior (Samuel Lange) plasmar el viaje interno de un personaje cuya excusa es el cabello, pero que carga consigo esta complicada etapa del auto descubrimiento, del hallazgo de su identidad e independencia como persona, ante una dura mamá (Samantha Castillo) atenta e hiriente frente a este proceso.
No es sorpresa, pues, que Pelo Malo continúe su recorrido por el mundo, arrasando en festivales y coleccionando artículos de críticos fascinados por la joya audiovisual, que también ha sido comercialmente estrenada en otros países.
6. La Distancia más Larga (2014)
Esta pieza resulta inmediatamente artística, y es que su actriz principal es La Gran Sabana y su imponente Roraima: un vaivén de imágenes sutiles que conquistan a cualquiera. La ópera prima de Claudia Pinto Emperador es un conglomerado espléndido que adorna la historia en la que cada personaje tiene un recorrido propio, pero que las circunstancias unen para influir entre sí.
Además, cuenta con la impecable actuación de la española y ganadora del Goya Carme Elias, quien le da vida a Martina, abuela del niño Lucas (Omar Moya) y quien halla un redescubrimiento entre la desolación y soledad.
Este film transmite paz, como un respiro susurrado en medio del caos, caos del que provienen todos los personajes que se hallan en una misma inmensidad. Iván Tamayo le aporta cotidianidad, el ceño fruncido que causa el estrés citadino, el dolor de la pérdida… “Una historia que acorta todas las distancias” y la postulación de Venezuela ante los premios Goya 2015, que podrás disfrutar aún en cartelera nacional.
El plus: Liz en Septiembre
Como la ración extra siempre es bienvenida, no cerramos sin antes hacer mención a lo más reciente en cines: Liz en Septiembre estrenada a principios de mes, de la sempiterna Fina Torres, que nos presenta un drama íntimo en donde se expone una visión paralela del amor: Liz (Patricia Velásquez) busca conquistar a Eva (Eloísa Maturén) por capricho pero, en el ínterin, aprenden una lección de vida mutua y surge un sentimiento realmente puro. El cast principal lo completan las maravillosas Mimí Lazo, Elba Escobar, Danay García y Arlette Torres, merodeando su talento en los magníficos escenarios naturales de Venezuela.
Y tú, ¿qué film añadirías a este cálculo?
Por Mónica Bermúdez Zovko